¡Que nerviosos estábamos!, por fin después de tantos días de proyecto, de aprender las características de los animales y las plantas, de ver, jugar y experimentar. Por fin el pasado miércoles nos fuimos a visitar una granja de las de verdad, por eso y porque íbamos a montar en autobús estábamos muy emocionados.
Preparados con nuestras mochilas, gorras y mucha ilusión nos fuimos a coger el autobús dirección a Salillas, donde el papa de Héctor nos estaba esperando para enseñarnos sus terneros y muchas cosas mas.
Un poco de juego.
Y mientras los mayores almorzamos gracias a la encantadora abuela de Héctor que nos preparo esta comida tan rica. Gracias de nuevo por tratarnos tan bien.
Siguiente parada, fuimos a conocer un pozo de nieve.
Y ya por fin fuimos a la granja a conocer a los terneros.
Y ya después nos volvimos al cole porque nos estaban esperando para ir a comer, cansados y felices por la gran experiencia que vivimos.
Gracias a toda la familia de Héctor por su disposición para todo y por acogernos tan bien.
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